En la concurrida Plaça de la Concòrdia encontramos este emblemático spot que nos transporta a los setenta. La decoración, como no podía ser de otra manera, nos lleva a la melancolía alegre del bolero, con figuras como Julio Iglesias o Marisol decorando las paredes.
Aquí se tapea, pero bien. Ingredientes de proximidad en una carta con tapas de autor, bikinis, cocas y postres. El bikini meloso de ternera es de otro mundo, y su clásico hummus de aguacate imperdible. Y si vais a lo clásico, aquí la tortilla de patata os devolverá a la infancia.
Comparte, ¡y cata más platillos!